domingo, 20 de diciembre de 2009

JØRN UTZON Y LA CASA DE LA OPERA

JØRN UTZON Y LA CASA DE LA OPERA

“Me gusta estar en el borde de lo posible”.
Jørn Utzon


Jørn Utzon nace en Copenhague en 1918. Inicia su transcurrir por la arquitectura, influenciado e integrado a las corrientes modernistas en boga. Trabajó con Alvar Aalto y Erick Gunnar, conoció a Leger y a Lecorbusier Wright y Mies, es reconocido dentro del abanico de la arquitectura internacional al ganar el concurso de la ópera de Sídney en 1957, obra que lo hizo galardonar con el premio Pritzker en el 2003. La idea de la Ópera de Sídney, nace a finales de los años 40 cuando Eugene Goossens, director del Conservatorio de Música de Nueva Gales del Sur, propone construir un gran teatro en la bahía de Sídney a través de un concurso que convocara los grandes arquitectos de la época, y en el que se presentaron 233 propuestas de 32 países e iniciando su construcción en 1959.

Con un diseño novedoso, por fuera de su tiempo y retando los conocimientos constructivos y de ingeniería de su época, proyecta una obra que choca y genera una serie de dificultades y controversias. Las relaciones entre el gobierno de Australia y el Arquitecto, que al principio fueron buenas se deterioraron en la medida que la obra superaba el presupuesto inicial, y se exigía por parte del ministro de obras públicas, definición en los diseños estructurales, y resolución de aspectos técnico constructivos, llegando a un punto de rotura donde el arquitecto en 1966 resuelve abandonar el proyecto y no regresar jamás a Australia. El edificio tardo 13 años en ser terminado y fue inaugurado en 1973 con la presencia de la reina Isabel II de Inglaterra. A manera de desagravio con su genio creador, el patronato de la Opera de Sídney le propuso a Jørn Utzon en el 2002 hacerse cargo de la supervisión de las obras de remodelación del inmueble, cancelándole así una deuda que tenían con la historia. El Utzon Room, es el único espacio que reconstruyó conforme a su diseño original. Su apertura, se celebró en el 2004 y contó también con la presencia de la reina Isabel II, y fue declarado en el 2005 Patrimonio Nacional.

La casa de la opera emerge sobre el mar de la bahía de Sídney sobre una plataforma construida en concreto armado, del que se izan las conchas o velas que transforman radicalmente el paisaje de la ciudad y se implantan como símbolo de un continente. La función primordial de las bóvedas pareciera ser la de llamar a todos los que la ven a parar al interior, como una bandera en constante movimiento, o como las campanas de iglesia que redoblan llamando a su feligresía. Al acceder el panorama cambia; el espacio se hace sobrio y elegante, marginándose del espectáculo exterior que representa su monumentalidad, y se desarrolla bajo sus propios cánones.



”El sol no sabía lo hermoso que era, hasta que se reflejó en este edificio” Louis I. Kahn.


La historia de la arquitectura encasilla a Utzon dentro de la tercera generación del movimiento moderno, no solo por desarrollar su obra arquitectónica alrededor de los años 50, sino por enmarcar su obra hacia una orientación social, de proyección abierta, transitable, integrada a su entorno a través de la utilización de planos horizontales, expresándolas como elementos simbólicos que se fundan con el pasado y formen parte de la historia, permitiendo el desarrollo de nuevas tendencias estructurales, liberando el espacio interior, hasta ahora sometido a la forma exterior y permitiéndose el derecho a la expresión por encima de la función.

Esta búsqueda constante de relacionar los objetos de arquitectura con el paisaje, y que le permite establecer como punto de partida un nuevo horizonte en cada una de sus obras, materializada en la plataforma como el arranque del edifico, divide las funciones primarias hacia la parte superior, y las secundarias en la parte inferior, estableciendo un nuevo lenguaje en la arquitectura de la segunda mitad del SXX. Giedion (2009) dice que Utzon “refleja nuestro periodo con toda su complejidad”, acogiendo contradictoriamente, la tecnología y la creación de nuevas formas de expresión, generando un lenguaje exterior rudo, sin maquillaje y un interior sobrio y cargado de decoración. La implementación de este primer principio de su legado, y que los historiadores coinciden en llamar el “plano horizontal como elemento constitutivo”, es un formalismo tomado de los precursores del zigurat sumerio, y encontrado en las pirámides egipcias y mayas. La plataforma remplaza el terreno y libera al usuario peatón del caos vehicular.

El segundo principio que establece Utzon es el derecho a la expresión, al levantar contra todo criterio funcional unas bóvedas en forma de cascaras superpuestas y arbitrarias, sin tener ninguna relación con el espacio interior, afirmando así que “la autonomía de la expresión debe reafirmarse en los edificios por encima de lo puramente utilitario.” Giedion (2009), colocando lo constructivo como un método cambiante en tiempo, y mejorable con el descubrimiento y uso de nuevas técnicas y materiales, subordinado al derecho a la expresión artística.


La Ópera de Sídney es la cumbre de la arquitectura del Modernismo. La combinación ideal de la creatividad intelectual, arquitecto y la imaginación tecnológica excelente, ha sido sublimada en una figura impresionante.
Nos muestra que la arquitectura es creada por la racionalidad humana. Tadao Ando


Después de innumerables dificultades y de superar diecisiete veces el presupuesto inicial, Sídney Inaugura en 1973, la Casa Ópera, quedando empotrada en su bahía como una de las más maravillosas representaciones arquitectónicas del siglo XX, por su creatividad formal y su innovación estructural, con un carácter escultural y fascinante que lo transforma en símbolo, pero que una vez se camina sobre su plataforma, o se accede a sus salas se torna de una escala humana que lo hace vivencial y participativo.

Si debiéramos darle un valor formal al teatro de la Ópera, lo enmarcaríamos dentro de edificio de corriente expresionista, en donde las conchas son secciones de una misma esfera, cubiertas por “miles de millones” de azulejos blancos y cremosos.

Si quisiéramos hacer una descripción formal o una primera lectura desde el objeto, de La Casa de la Ópera, se podría decir que esta compuesta de Sídney por tres grupos e bóvedas o conchas, implantadas sobre la plataforma, en cuyo interior funcionan seis salas de espectáculos y un restaurante y rodeadas de terrazas que asumen la función de vestíbulos. Su sala principal El Concert Hall, con capacidad para Dos mil seiscientas setenta y nueve plazas 2 mil 679 asientos tiene el órgano mecánico más grande del mundo. En el edificio se presentan la Ópera, Orquesta Filarmónica de Sídney, el ballet de Australia, la Compañía de Danza de Sídney, grandes producciones de arte dramático y danza, producciones teatrales y musicales pequeñas o individuales, y las expresiones contemporáneas del arte.

Dentro de una segunda lectura, desde la tecnología, podemos establecer que la Ópera de Sídney, es una obra maestra de la arquitectura del siglo 20, por su diseño y sus alcances excepcionales de ingeniería e innovación tecnológica, que permitieron un nuevo impulso inspirador a la creatividad colectiva de arquitectos, ingenieros y constructores.
Dentro de una tercera lectura que permite cambiar el significante de la obra en un nuevo significado, entendemos la relevancia del objeto de arquitectura creado con una función específica, pero por su condición icónica, asume la condición de monumento urbano, trascendiendo lo local y posicionándose como un referente de la arquitectura en el mundo, transformando en un símbolo de identidad nacional.

Todos estos valores que ennoblecen el objeto arquitectónico, parecieran pasar desapercibidos para el objeto mismo, que a pesar de su grandeza, no se permite el lujo de ser inoperante y contemplativo, sino que día a día cumple con su función para la cual fue concebido, llamando a gritos con sus velas a contemplar el espectáculo que en su interior sobrio se presenta, y dentro de los cuales cuenta con más de dos mil quinientas presentaciones al año. Su primera presentación fue la ópera “La Guerra y Paz” de Sergei Prokofiev.

Reconocido como uno de los más grandes arquitectos de la modernidad, Jørn Utzon murió a los 90 años de un ataque al corazón el sábado 29 de noviembre a las 12.30 horas, en Dinamarca, dejando un legado inmortal, de la transcendencia de la obra de arquitectura por encima de los valores formales, expresivos o constructivos.

Utzon construyó varias obras con una arquitectura racional y sensible, con un interés primordial en dos aspectos opuestos: la relación con el paisaje, y la atención al detalle y la construcción. El conjunto de 60 casas Kingohusene en Elsinore, Dinamarca, que construyó entre 1957 y 1961 es uno de sus proyectos más exitosos, construidas en ladrillo y tejas de arcilla, alrededor de patios privados, generando un juego de desplazamiento de casa y patio, cada una respecto a su anterior, compartiendo muros medianeros, formando esquinas que entran y salen configurando los accesos e integrándose al paisaje.


”Utzon hizo un edificio muy por delante de su tiempo, muy por delante de la tecnología disponible, y perseveraron a través de críticas maliciosas extraordinaria a un edificio que cambió la imagen de todo un país. Es la primera vez en nuestra vida que una pieza tan épica de arquitectura ganado presencia tan universal “. Frank Gehry




BIBLIOGRAFÍA

• Ferrer J. (2006) Jorn Utzon: obra y proyectos. Barcelona Editorial Gustavo Gili.

• Sanz J. (1998) Arquitectura en el siglo XX: la construcción de la metáfora. Madrid Editorial Montesinos.

• Giedion S. (2009) Espacio, tiempo y arquitectura: el futuro de una nueva tradición. Ed. Definitiva, Barcelona Editorial Reverté.




Ensayo presentado en la cátedra de PENSAMIENTO URBANO ARQUITECTÓNICO CONTEMPORÁNEO II dentro de la Maestría ARQUITECTURA CUIDAD E IDENTIDAD de la UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DEL TÁCHIRA

CATEGORIZACIONES URBANAS

CATEGORIZACIONES URBANAS


"Tiene que ver con una nueva forma de ver y estar en el mundo...
Esta arquitectura va más allá de ser un espejo del presente,
como sucedía con la arquitectura de los deconstructivistas
durante el final de los 80." Rem Koolhaas



Las categorizaciones urbanas, que tanto comprometieron la vocación de la ciudad, se rompen dentro del análisis urbano de la ciudad hojaldre (García C. 2004), al evidenciar que la ciudad no posee por sí misma una categoría, sino que es la suma de todas las manifestaciones y decisiones de sus habitantes superpuestas.

El lenguaje urbano, que permite la lectura de la ciudad, nos convida a visualizar las múltiples facetas que contiene un asentamiento dependiendo desde la óptica a que se someta. Así, la ciudad se vuelve sensorial y se interpreta de manera individual dentro de un imaginario colectivo, y contradictoriamente desde sus conexiones funcionales, reales o virtuales.

Las cuatro visiones, que se desprenden del texto de “La Ciudad Hojaldre”, que se despiezan en doce formas de ver la ciudad, contienen en sí misma la realidad contemporánea de las actividades citadinas comprometiendo lo económico, lo comercial, los social, lo recreativo, lo lúdico, lo cultural, lo filosófico, lo ambiental, lo tecnológico, entre otras, donde las actividades se sobreponen. Esta visiones ofrecen la ciudad desde el existencialismo, es decir nos muestran “que es la ciudad”, y no una visión estructuralista de “como es la ciudad”, sin establecer categóricamente modelos de ciudad generales o universales, lo cual deja abierta la puerta para significar otras formas ver la ciudad.

"La sociedad industrial es urbana. La ciudad es su horizonte", afirma Choay (1965), y se aplica al paisaje de la contemporaneidad, de la cultura urbana globalizada que se impone en este siglo y se extiende al análisis de las teorías urbanas recientes, y la aplicación de conocimiento de las teorías de Jane Jacobs y Kevin Hynch. La crisis del petróleo, el tardo capitalismo y el posmodernismo, influyen en la cultura urbana del siglo XXI generando relatos dependiente e independientes, conectados o no, propios del pensamiento contemporáneo se agrupan en cuatro visiones existenciales.

Simplificar el concepto de ciudad, en la figura del hojaldre, y determinar que es la sucesión de hechos y acontecimientos, en vez de la formalidad y racionalidad de lo edificado, que se yuxtaponen, sobreponen, amalgaman, de manera simultánea y dinámica, el componente de la formación de lo urbano, que genera una ciudad compuesta y entendida desde la actividad del ser que habita, es el gran aporte de Carlos García Vázquez a la interpretación del urbanismo contemporáneo.

Así, la ciudad no es el espectáculo de las grandes obras de infraestructura, ni la aplicación de grandes planes de ordenamiento o desarrollo, sino, la suma de relatos, que se integran o se separan.

La ciudad no es un fin, es la consecuencia de innumerables acontecimientos, conectados o no, inclusive contradictorios, donde se lee la cultura urbana de ésta contemporaneidad. Carlos García, Enfrenta la ciudad en cuatro visiones antagónicas, cultural, sociológica, orgánica y tecnológica, y las fragmenta para su comprensión en capas. Las capas generales del hojaldre, analizan la ciudad desde la historia con una visión culturalista, desde la sicología y la economía con una visión sociológica, desde la filosofía y la ciencia con una visión organicista, y desde la técnica con una visión tecnológica.

Estas visiones, a su vez, se pueden entender desde la óptica de García Vázquez, en el resultado de amalgamar realidades urbanas que se entrecruzan desde lo económico, social, político, filosófico, cultural y lúdico, materializando 12 capas que se interponen y que llama, ciudad de la disciplina, ciudad planificada, ciudad poshistórica, ciudad global, ciudad dual, ciudad del espectáculo, ciudad sostenible, ciudad como naturaleza, ciudad de los cuerpos, ciudad vivida, ciberciudad y de clip, todas vistas desde la experiencia subjetiva y existencialista del autor.

La ciudad deja de ser la gran obra de infraestructura formal y espacialmente, conectada a través de de cordones de asfalto y se muestra como la sucesión, interconexión y yuxtaposición de fragmentos, ya no entendidos desde la forma la función y la estructura vitrubiana, sino desde lo vivencial, demarcando territorios que se proyectan sobre el suelo urbano, como una consecuencia del ser habitante, que genera tensiones sobre la superficie.

Rossi (1966) en su obra “la Arquitectura de la ciudad” utilizó la frase “la ciudad por partes” para significar el fraccionamiento urbano que Carlos García coloquialmente compararía con el hojaldre, pero difiere de Rossi cuando afirma en un sentido meramente estructuralista “…que los lugares son más fuertes que las personas, el escenario más que el acontecimiento.”, al definir la ciudad en fragmentos que son consecuencia de un acontecer existencial forzado por sus habitantes, cambiante, superpuesto y en continuo movimiento que rompe el concepto formal de la ciudad con vocación definida.

La visión Culturalista, analizada en el escrito anterior, se limita a relatos temporales en espacios determinados que aclaran el curso histórico de la planificación urbana desde el movimiento moderno.

Así, la ciudad de la disciplina o “refundación científica del urbanismo” según Aldo Rossi, maneja tres elementos a saber: La lectura de lo existente, Las relaciones entre tipología y arquitectura, y la identidad, enfrentan la ciudad desde el estructuralismo basado en la historia.

La ciudad de la planificación, enmarcada dentro de la utopía del ordenamiento territorial y los planes generales de desarrollo, quedo sometida al caos, del crecimiento acelerado desordenado y vernáculo, que fue más rápido que los planificadores, asumiendo este papel los inversionistas privados que sometieron los planes urbanos a sus intereses económicos, y su contraposición expresada en la ciudad Chip, con su descentralización, desregularización y desidentificación de sus actividades económicas.

La ciudad poshistórica, opuesta a las dos visiones anteriores, presenta un nuevo urbanismo basado en tendencias históricas, e implementado con códigos arquitectónicos que pretenden introducir una nueva lectura, con el peligro de generar una desintegración formal del objeto entre sí y con su entorno.

Desde la visión sociológica, con parámetros netamente existencialistas, se plantea la ciudad desde la sociedad que la habita.

Analicemos las cuatro formas de ver la ciudad a partir de lo social:
La ciudad Global, ajustada a un sistema económico de oferta y demanda, de producción y consumo, amparado en la comunicación, sin estar determinados por el espacio físico. Esta visión urbana genera una nueva lectura de ciudad: la Metápolis, en donde los medios urbanos, oferta y servicios se integran a través de la res global de comunicaciones generando una nueva forma de ciudad sin espacio físico.

La ciudad Dual, que se alimenta por las contradicciones humanas de clase, raza y nacionalidad, definidoras de su espacialidad y segregación, muestra oculta dos caras de una misma ciudad, donde los bordes urbanos de la fragmentación toman sentido. Este proceso de marginalización es llamado gentrificación.

La ciudad del espectáculo, que según Jean Baudrillard, circula entre lo ocioso, lo cultural y el consumo, sumando escenarios que afectan lo económico, en una descarada simulación de ciudad.

La definición de Ciudad Sostenible como modelo urbano, se puede definir al igual que la expresión desarrollo sostenible que según el Informe Brundtland (UNCED, 1987), “«… es el desarrollo que satisface las necesidades actuales sin poner en peligro la capacidad de las futuras generaciones de satisfacer sus propias necesidades»

Desde la visión organicista, encontramos:
La ciudad como naturaleza, se basa en la aplicación de fenómenos naturales para representar el crecimiento y la complejidad de un conglomerado urbano, enfrentando aspectos antagónicos, propios de lo natural como la armonía y la belleza versus el caos y la multiplicidad.

Analiza la ciudad como un ser humano, basado en mediciones antropomórficas, inyecta a la ciudad caracteres propios de los seres vivos, desde los primitivos conflictos, caos, enfermedades, hasta lo armónico y saludable.

La ciudad vivida, es una visión fenomenológica nacida de las vivencias e interpretaciones que cada ciudadano da de su hábitat llamada “ciudad de los sentidos” negando los planteamientos urbanos de la modernidad.

Por último la visión tecnológica de la ciudad, dividida en La ciberciudad, se determina por dos componentes conceptuales: el ciberespacio como en “lugar de estar”, por donde se circula como si se tratara de un medio físico tangible; y el cibernauta que es el ser-habitante de ese espacio virtual. Este nuevo “territorio” permite la rotura de lo material y del desplazamiento físico, reformulando el urbanismo.


Ensayo presentado en la cátedra de PENSAMIENTO URBANO ARQUITECTÓNICO CONTEMPORÁNEO II dentro de la Maestría ARQUITECTURA CUIDAD E IDENTIDAD de la UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DEL TÁCHIRA

EXISTENCIALISMO Ó ESTRUCTURALISMO

EXISTENCIALISMO Ó ESTRUCTURALISMO

Tendencias arquitectónicas del siglo XX, marcadas
por el existencialismo y el estructuralismo.

I

EXISTENCIALISMO

El concepto de existencialismo, se puede enmarcar en la definición de movimiento filosófico que se basa en la búsqueda del significado, la esencia de la vida del ser humano como entidad individual. Sus fundamentos son la libertad, la temporalidad y la existencia del ser en el mundo; la relación del “ser que existe”, consigo mismo, con su trascendencia, contradicciones y angustias; la condición humana por encima de su esencia.
Influye en el pensamiento existencialista la fenomenología de Husserl, materializándose al principio en la literatura donde se postularon argumentos filosóficos de Schopenhauer, Kierkegaard, Nietzsche, Unamuno, entre otros y siendo sus pensadores más notorios Heidegger, Jaspers y Sartre
Esta relación “Fenomenología – Existencialismo” influye sobre la crítica arquitectónica de mitad del siglo XX, según Montaner (2007) de manera Iconográfica, histórica, revisionista y crítico-conceptual,
Desde una visón iconográfica, viendo la arquitectura como una obra de arte, dentro de un contexto cultural evidenciando una nueva conciencia fenomenológica contemporánea.
Desde la recuperación del sentido de la historia, siendo La arquitectura un fenómeno y una experiencia, que busca la recuperación del valor histórico y la tradición con una interpretación formalista, dentro de la capacidad creativa del artista y la relación del arte con la sociedad, así como, un espacio existencial, en donde el pasado de la arquitectura en el contexto de la revisión y la crisis, engloba la arquitectura moderna.
En un enfoque tradicional revisionista, se considera que el movimiento moderno trae consigo más las implicaciones destructivas que las constructivas y se condena la privatización de la ciudad.
En una visión crítica conceptual busca conciliar el idealismo de estilo forma y expresión con la conciencia del rol predominante de las estructuras sociales, ideológicas, culturales, artísticas y económicas.




II

ESTRUCTURALISMO

Su punto de partida se establece en la obra de Ferdinand de Saussure “Curso de lingüística general” (1916) y acogida por Levi-Strauss (1908-2009) fundamentado, en la etnología, y siendo seguido por Lacan con su psicoanálisis, Lois Althusser y Michel Foucault.
El pensamiento estructuralista pretende definir las relaciones, tales como prácticas, fenómenos, costumbres y actividades como sistemas de significación por las que se produce el significado dentro de una cultura. Este reconocimiento de la estructura pretende romper esta dependencia cultural.
Si analizamos el transcurrir histórico del estructuralismo desde mediados del siglo XX, encontramos una contraposición entre Robert Venturi, (1925) quien afirma que la esencia de la arquitectura radica en la percepción de las formas, y Aldo Rossi (1931-1997) quien insiste en el poder de la idea y el mecanismo del pensamiento analógico que posee la memoria, siendo la estructura espacial básica del edificio dentro del razado urbano el que define la tipología del objeto y no los elementos formales, funcionales o estructurales. Dentro de esta línea estructuralista se enmarcan Carlo Aymonimo, (1926), Giorgio Grassi, (1935), Rafael Moneo (1937). En los años 60´ el estructuralismo es reinterpretado por: Peter Collins (1920-1981) con su eclecticismo como condición del desarrollo de la arquitectura domestica; Joseph Rykwert, (1926) quien pretende recuperar los valores significativos de los objetos y los espacios; Gastón Bachelard (1884-1962), Umberto Eco (1932), Renato de Fusco (1929), Amos Rapoport , Helio Piñon y Josep Muntañola.
En los años 70, Christopher Alexander, (1936) establece que cada individuo sea el creador de su propio espacio; y Charles Jencks (1939) que interpreta la arquitectura desde los símbolos y los significados, diferenciando la arquitectura posmoderna y tardomoderna.
La influencia de Manfredo Tafuri (1935-1994) en los años 80 y su crítica ideológica, El formalismo analítico de Colin Rowe (1920-1999), Rowe, llega a la teorización basado en la dualidad de la transparencia literal y la fenomenología.
Son continuadores del pensamiento estructuralista y la metodología crítica, Alan Colquhoun (1921) quien basa su pensamiento estructuralista en el conocimiento de la historia de la cultura y de la arquitectura, Enrico Tedeschi (1910-1978), defensor de los conceptos básicos de la importancia de la historia contemporánea y el interés en presentar el espacio arquitectónico como la esencia de la arquitectura; y, Marina Waisman, (1920-1997) quien revisa las interpretaciones sociológicas y estructuralistas con una notoria sensibilidad artística.
Hasta aquí, hemos recorrido el camino del existencialismo, su giro hacia el estructuralismo y las distintas corrientes e interpretaciones que los diferentes actores del pensamiento arquitectónico moderno y contemporáneo han dado a esta tendencia, pero cada uno es una interpretación individual, conformándose una diversidad de formas de ver la arquitectura.



III

De los textos de Aldo Rossi la “Arquitectura de la ciudad” y de Reyner Banham “Megaestructuras” vemos como se pretende desde una óptica estructuralista definir un modelo teórico aplicable para la ciudad del modernismo, cada uno desde un polo opuesto, uno desde el culturalismo y el otro desde el progresismo, coincidiendo ambos en que la arquitectura de la ciudad es una realidad compleja individual e independiente organizada en el tiempo – espacio, que no puede ser abarcada de una óptica racional impuesta. Criterios vitrubianos de la forma, la función y la estructura como elementos contenedores de la ciudad, quedan desbordados por la multiplicidad de realidades que viven los entornos urbanos, hechos urbanos que no son estáticos en el tiempo, sino que generan movimientos y cambios significativos en el actividad de la ciudad, inclusive sin que cambie su entorno ni su contenido físico. El habitante de la ciudad o como lo llama Jeffrey Cook “vector supersocializado”, con sus interrelaciones y sus complejidades, es el generador, el hacedor de la ciudad, el fin último de esta, haciendo de la ciudad una superposición de ciudades que interactúan entre ellas.



BIBLIOGRAFIA

Garcia, C. (2004) Ciudad Hojaldre, Barcelona, Editorial G.Gili
Hereu, P. (1999) Textos de arquitectura de la modernidad, Madrid, Editorial Nerea
Montaner, J. (2007) arquitectura y crítica 2ª edición, Barcelona, Editorial G.G


Ensayo presentado en la cátedra de PENSAMIENTO URBANO ARQUITECTÓNICO CONTEMPORÁNEO II dentro de la Maestría ARQUITECTURA CUIDAD E IDENTIDAD de la UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DEL TÁCHIRA

domingo, 13 de diciembre de 2009

EDUCACION Y CIUDAD

Quiero compartir con ustedes estos videos de urbanismo y cultura ciudadana, realizados por la Alcaldía de Bogotá

EDUCACION Y CIUDAD - CATEDRA DE PEDAGOGIA 1 parte
http://www.youtube.com/watch?v=1eO9ROsyI94

EDUCACION Y CIUDAD - CATEDRA DE PEDAGOGIA 2 parte
http://www.youtube.com/watch?v=1PVOKWT2vbo

EDUCACION Y CIUDAD - CATEDRA DE PEDAGOGIA 3 parte
http://www.youtube.com/watch?v=-rtQLZm36EI

EDUCACION Y CIUDAD - CATEDRA DE PEDAGOGIA 4 parte
http://www.youtube.com/watch?v=Pg_GWChPJOE

EDUCACION Y CIUDAD - CATEDRA DE PEDAGOGIA 5 parte
http://www.youtube.com/watch?v=hfv_fGW8DSE

EDUCACION Y CIUDAD - CATEDRA DE PEDAGOGIA 6 parte
http://www.youtube.com/watch?v=YchsMkdOhAo

jueves, 10 de diciembre de 2009

CIUDAD VERDE

CIUDAD VERDE



LOS PARQUES URBANOS


Las ciudades crecen al ritmo de la globalización y el contacto con la naturaleza se hace cada vez más distante. Esta carencia del “verde” dentro de la selva de cemento, trata de ser menguada a través de los Parques Urbanos, no solo como una reminiscencia a nuestro pasado de recolectores y cazadores, sino como un pulmón dentro de la ciudad, que mitigue las desastrosas consecuencias de la urbanización.


Todas las ciudades del mundo ostentan zonas verdes de gran extensión dentro de su casco urbano: Manhattan con el Central Park, San Francisco con el Golden Gate Park, Duisburg-Nord Landscape Park, Duisburg-Alemania, Jardín Botánico de Bordeaux, el Parque Metropolitano Guanguiltagua en Quito Ecuador, el parque Katagua en Caracas, Venezuela, o el Simón Bolívar en Bogotá, Colombia, son ejemplos puntuales, sin que su extensión sea la solución para la falta de espacio verde en la ciudad, ni para su interacción social, y en muchos casos aparecen como elementos fraccionadores de la malla urbana, generando aislamientos y bordes urbanos, e incluso sin ser visitados nunca por muchos de los habitantes de la ciudad, ya que no generan atracción hacia la mayoría, sino se hacen excluyentes para un solo grupo social.



FUNCIONES DE LOS PARQUES URBANOS


Los parques urbanos son considerados como parte integral de la estructura urbana, con funciones especificas:
1. Desde de lo ecológico, por su influencia en el microclima, en la conservación de fuentes de agua, flora y fauna.
2. Desde del paisajismo como componente estético del paisaje urbano.
3. Desde lo lúdico como espacio de recreación, ocio, deporte y turismo.
4. Desde lo público como espacio abierto incluyente, de relaciones humanas, convivencia ciudadana, educación y cultura, adquiriendo una función social como espacio determinantes de las relaciones sociopolíticos y culturales.


LA CIUDAD PUEDE SER UN PARQUE

Indicadores propuestos por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y por el Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA, 2003) recomiendan un mínimo de 9 m2. Aconsejando que cada habitante tenga un área verde a no más de 15 minutos a pie, indicador que no se cumple en casi ninguna de los grandes asentamientos metropolitanos, debido a que se hace imposible habilitar lotes ya urbanizados como espacio verde, para lograr este objetivo.


En consecuencia, se hace necesaria una visión de la ciudad desde el paisaje que integre consecuentemente “lo verde y lo duro” entrelazando los espacios verdes, libres y públicos, tales como plazas, parques, vías, aceras, separadores, canales, quebradas, espacios residuales, lotes baldíos y demás recorridos que se forman a través de la ciudad, proponiendo un diseño urbano paisajístico, armónico e interconectado, generando un recorrido del paisaje a través de la ciudad, formando espacios públicos sustentables e incluyentes que reúnan lo recreativo, ecológico, educativo, histórico, lúdico, y lo social, como el rescate del ágora, el lugar donde los habitantes de la ciudad se puedan reunir, sin distinción.


Este propósito de incluir el espacio verde, público y sustentable dentro de la malla de asfalto y concreto, nos lleva al mejoramiento ostensible de la salud pública integral humana y ecológica a todos los habitantes urbanos, generando espacios de sustentabilidad y equidad social, haciendo flexible el significado de recreación en el parque público, al sacarlo del espacio rígido demarcado y esparcirlo por toda la ciudad, como un elemento verde, dinámico, transitable, y vivencial, de participación ciudadana, habitual en el recorrido diario de cada ciudadano.


Vivir y transitar la ciudad “a pie” por sendas peatonales verdes, en bicicleta como vehículo de transporte diario y no solo recreativo, a través de ciclorutas planificadas y seguras, integradas a un sistema de transporte masivo, económico sustentable y ecológico, dentro de un plan de movilidad eficiente, todos envueltos dentro de un recorrido arborizado, con espacios para permanecer, harían de la ciudad un gran parque, un espacio público en concordancia con la naturaleza, incluyente, vivencial, existencial y lúdico.



Ensayo presentado en la Catedra de Intervención Urbana, dentro de la Maestria Arquitectura Ciudad e Identidad de Universidad Nacional Experimental del Tachira - UNET, San Cristóbal, Venezuela.

sábado, 5 de diciembre de 2009

Memorias Coloquio INJAVIU 2009









Coloquio INJAVIU 2009

" RENOVACIÓN, REHABILITACIÓN O EXPANSIÓN URBANA:
Elementos para el debate en el contexto iberoamericano”
Bogotá, D. C. 9,10 y 11 de Noviembre de 2009
http://www.javeriana.edu.co/arquidis/injaviu/coloquio//arquidis/injaviu/coloquio/

Presentación:

La constante presión generada por el crecimiento demográfico, con el consecuente aumento de demanda de vivienda y soportes de vida urbana en las ciudades contemporáneas, sitúan como tema de reflexión la disyuntiva entre el regreso a la ciudad consolidada en deterioro o la salida a la expansión regional. Como aspectos presentes en la reflexión están el desaprovechamiento de las infraestructuras urbanas instaladas en los centros y áreas en deterioro urbano y socio económico, la falta de políticas y programas que propicien la recuperación de sectores de interés patrimonial (arquitectónico, urbano y cultural) que se encuentran en deterioro y cuya recuperación les brinde nuevas dinámicas de uso; la rehabilitación arquitectónica y urbana con procesos integrales de intervención que generen la recuperación de la vitalidad urbana; la pérdida de la memoria urbana y la desintegración de los tejidos sociales en la ciudad; los retos y posibilidades de la gestión urbana que ofrezca alternativas de solución a las desigualdades urbanas; la carencia o escasez de suelo de expansión que permita el crecimiento urbano y la atención de la creciente demanda de vivienda y servicios urbanos; la formación de suelo urbano asequible para la producción de vivienda interés social; las políticas de control y atención a los crecimientos informales o clandestinos en la ciudad; entre otros.

Ejes temáticos

Eje 1. Producción de vivienda de bajo costo y acceso al suelo.
Eje 2. Crecimiento urbano, Transformación y sostenibilidad urbanas.
Eje 3. Recuperación de áreas urbanas y participación ciudadana.
Eje 4 Gestión urbana, actores sociales e integración social
Eje 5 Historia y Memoria urbana.

ARQUIBITAR PRESENTE EN INJAVIU 2009




miércoles, 2 de diciembre de 2009

PRIMER CONGRESO INTERNACIONAL DE ARQUITECTURA Y AMBIENTE - SALTA - ARGENTINA



PONENCIAS DEL PRIMER CONGRESO INTERNACIONAL DE ARQUITECTURA Y AMBIENTE - SALTA ARGENTINA REALIZADO EL 2, 3, 4, DE NOVIEMBRE DE 2009

http://www.congresosalta2009.com.ar/ponencias.php



PRESENTACION



La arquitectura, una de las disciplinas más antiguas del conocimiento humano, y que ha creado maravillosos monumentos a lo largo de la historia de la humanidad, se encuentra hoy ante un desafío grandioso.

En un momento en que la profesión se ha extendido por todo el mundo, donde sus organizaciones han cobrado relieve internacional, y donde cada vez se reconoce más la importancia de la labor del arquitecto, se ha agigantado la inquietud y se ha expandido el debate por revisar el rol y el alcance de esta noble profesión.

El mundo se encuentra ante nuevos desafíos que hacen, incluso, a la propia sobrevivencia de la humanidad. Cambio climático global. Posibilidad de enfrentarnos más y más con catástrofes de una naturaleza embravecida por las agresiones que la artificialización del mundo le ha provocado. Aumento de la exclusión social. El reinado del automóvil por sobre las personas y la ciudad. Son algunas de las manifestaciones que hoy urge enfrentar y para las cuales la arquitectura quiere denodadamente renovar sus aportes.

La ciencia urbana, la planificación territorial y la arquitectura responsable de los materiales y la tecnología que utiliza, han venido siendo desde hace más de un siglo metas deseadas por muchos arquitectos, que han querido ir más allá de la producción de edificios aislados, con escasa responsabilidad sobre la naturaleza y el paisaje cultural. Pero falta mucho para que la arquitectura se fortalezca con nuevos conceptos e instrumentos hacia una sustentabilidad en la construcción del hábitat.
Sustentabilidad que no puede ser sólo utilitaria y funcional, sino que debe abarcar las necesarias dimensiones simbólicas y artísticas para la creación de espacios con la genialidad del lugar.

El Colegio de Arquitectos de Salta ha decidido encarar un paso trascendente hacia la mayor contribución de la arquitectura para un desarrollo sustentable, y convocó al efecto a la Fundación CEPA, reconociendo sus 35 años de trayectoria ambiental, pionera en dicho enfoque en América Latina, para coorganizar este 1º Congreso Internacional de Arquitectura y Ambiente.
He aquí entonces la primera Convocatoria a este ambicioso Congreso, en el cual participarán algunas de las más destacadas personalidades en este enfoque innovador, tanto en ideas como en métodos y realizaciones, creando así un foro de información y debate que aspira a convertirse en un gran acontecimiento latinoamericano con proyecciones internacionales.

TEMAS DEL CONGRESOLas diversas sesiones para presenciar y debatir lo más innovador que se pueda reunir en materia de arquitectura y ambiente, han sido organizadas en tres grandes líneas o campos temáticos vinculados:


•Sustentabilidad y arquitectura, (la cuestión bioclimática, la tecnología, la identidad y el patrimonio edilicio)
•Sustentabilidad y ciudad, (el urbanismo, el paisaje cultural urbano, el transporte colectivo)
•Sustentabilidad y territorio, (el planeamiento territorial, el paisaje, el turismo y las grandes infraestructuras).
Además, y como tema transversal a todos los anteriores, la enseñanza de la arquitectura.

viernes, 20 de noviembre de 2009

MEMORIAS DEL VIII SEMINARIO DE INVESTIGACIÓN URBANO-REGIONAL




MEMORIAS DEL VIII SEMINARIO DE INVESTIGACIÓN URBANO-REGIONAL

En Bogotá, durante el 28, 29, y 30 de septiembre de 2009, se realizó el octavo encuentro de investigación Urbano-Regional, dnde el tema central fue "Gobierno de Municipios y aglomeraciones urbanas.

Contaron con la participación de expositores de Latinoamérica y Europa, donde se debatieron resultados y retos de municipios y aglomeraciones urbanas, en aspectos sociales, políticos, económicos y ambientales del territorio

El seminario se llevó a cabo en la Universidad nacional de Colombia organizado por la Asociación de investigadores Urbano Regionales ACIUR y el Instituto de Estudios Urbanos IEU de la Universidad Nacional de Colombia.

martes, 10 de noviembre de 2009

MEMORIAS DEL XXXI CONGRESO COLOMBIANO DE ARQUITECTURA



Las Memorias del XXXI CONGRESO COLOMBIANO DE ARQUITECTURA (videos, conferencias y diapositivas presentadas por los expositores) se podrán acceder siguiendo las instrucciones de este link


www.sincro.ikunamedia.com/sca/200910/form.php

RESPONSABILIDAD CON EL ENTORNO
Octubre 7, 8 y 9 de 2009
San Andrés Isla, Colombia

Congreso Colombiano de Arquitectura

El Congreso Colombiano de Arquitectura es un acreditado foro académico y comercial que durante sesenta años ininterrumpidos ha convocado a los profesionales e instituciones relacionados con la arquitectura.

Tematicas principales:

El aporte que hacen los arquitectos desde su campo profesional para la solución de los problemas del país.
Las políticas gubernamentales sobre aspectos relacionados con la construcción de ciudades y la provisión de vivienda para todos los colombianos.
La tendencia contemporánea de la arquitectura y el urbanismo a nivel nacional e internacional.
La enseñanza de la arquitectura en el país y la actualización del profesional de la arquitectura.

La versión 2009 se realizó del 7 al 9 de octubre en uno de los sitios más paradisiacos del Caribe colombiano, el archipiélago de San Andres, providencia y Santa Catalina, logró ser un espacio de análisis y reflexión crítica sobre temas prioritarios para el desarrollo de la arquitectura y los arquitectos en su entorno bajo tres conceptos: desarrollo profesional, hábitat y proyectos de arquitectura

Este fué el primer paso para consolidar a Colombia como epicentro de grandes eventos de éste tipo: ya que durante el Congreso se realizó la presentación de la Bienal Iberoamericana de Arquitectura 2010 que se realizará en la ciudad de Medellín (Colombia) en el mes de octubre de 2010 bajo el eje temático de “Urbanismo Social”.

martes, 25 de agosto de 2009

RE-APERTURA CALLE 12 ENTRE Av. 5E y 6E

RE-APERTURA CALLE 12 ENTRE Av. 5E y 6E
Barrio la Riviera - Cúcuta - Norte de Santander.




































DISEÑO URBANO

JORGE BITAR RAMÍREZ -
ARQUITECTO.

Colaboradores
JHIME SANTOS JAIMES,
JORGE ANDRES BITAR QUIÑONEZ,
ING. CARLOS ALBERTO PEÑA SOTO.


El presente proyecto contiene los estudios y diseños para la reapertura del la Calle 12 entre Avenidas 5E y 6E del barrio la Riviera de la ciudad de Cúcuta. El tramo de vía aquí diseñado fue ocupado en los años 80 por una construcción y recuperada para la ciudad a través de una acción popular.

La vía diseñada, una vez construida resolverá la movilidad, al servir de desvío de la diagonal Santander hacia los barrios del Norte de la ciudad y resuelto el cruce hacia la diagonal Santander con la Av. 5E generará un retorno que puede suplir de alguna manera la falta de prolongación de la calle 13, generando un nuevo acceso al centro de la ciudad por el barrio Caobos.

Se desarrolla sobre un terreno inicialmente a nivel de la Av. 6E y se deprime en tres (3) metros en el centro de la misma en un tramo de cuarenta (40) metros, volviendo a ascender al nivel de la Av. 5E, constituyéndose como una vía ondulada, con pendientes longitudinal al eje de la vía de ocho (8°) grados. Su construcción requiere moderado movimiento de tierras y permite alineamientos más o menos rectos, sin mayores dificultades en el trazado y en la explanación.

El estudio se enmarca dentro de un diseño geométrico de la vía, tendiente a la necesidad de complementar la malla vial existente. El proyecto ofrece un mejoramiento del tránsito urbano como justificación al esfuerzo económico que debe realizar la Alcaldía para su construcción.

Definido el trazado de la vía conforme a los planos aprobados presentados por el departamento de planeación corporativa, se procedió al reconocimiento del lugar a través de visita de campo cartas catastrales y fotografías satelitales, con el fin de corroborar los trazados planteados con base en la cartografía. Se determinó, mantener la ondulación que presenta el tramo, y construida en los años 80 como acceso a los sótanos de las edificaciones que invadieron el espacio público, ya que realizar un relleno con muros estructurales, encarecería la obra y no garantiza su correcta compactación; en cambio mantener la ondulación diseñada dentro de los parámetros técnicos de INVIAS y el Ministerio de transporte, garantiza, el buen desarrollo de la movilidad vial y redunda en beneficio económico del municipio.

- ARQUIBITAR ARQUITECTOS
- 2009

sábado, 15 de agosto de 2009

EDIFICIO DE LA GOBERNACIÓN DEL ESTADO TÁCHIRA - CRÍTICA ARQUITECTÓNICA

CRÍTICA ARQUITECTÓNICA AL EDIFICIO DE LA GOBERNACIÓN DEL ESTADO TÁCHIRA
REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

I

INTRODUCCIÓN

En la multiplicidad de senderos por los que es posible abocar de una parte, el análisis critico de un objeto de arquitectura, encausado el estudio por la existencia de un hecho cumplido que afecta su entorno, desde un punto de vista práctico, bajo categorías funcionales y morfológicas, basado en la formulación del diagnostico descriptivo de un hecho arquitectónico existente, estableciendo un criterio indiscutible y objetivo de la situación de tal hecho, y por otra parte, trascender las barreras de lo arquitectónico y urbano entrando a analizar los roles que se establecen en la existencia del objeto y sus implicaciones de carácter social, vivencial, humano y de pertenencia, en la propuesta semántica y sintáctica del entorno, queremos elevar a nivel de crítica arquitectónica el edificio de la gobernación del Táchira, tomando conceptos filosóficos y urbanos a fin de generar en cada uno de nosotros una reflexión respecto al objeto, su implantación y su función social, su significación en la estructura político administrativa, sin pretender ahondar en los criterios del diseño, la forma, la función y la estructura del objeto, ni entrar a determinar o cualificar criterios estéticos.

La arquitectura, como manifestación de lo construido, de acuerdo a la triada construir, habitar, pensar de Heidegger, en su doble acepción, tanto intangible como tangible que da respuesta a los cambios permanentes y radicales que ha sufrido la sociedad, bien sean históricos, filosóficos, o políticos expresa la apertura al pluralismo, bajo un escenario dialógico, estableciéndose como testigo del momento histórico en que se ejecuta la obra. Desde este punto de vista, el hecho arquitectónico ya cumplido y objeto de crítica, pasa a un nivel secundario y es relevado por su entorno, el contexto social, sus habitantes permanentes o fluctuantes y las actividades desarrolladas en él, tomando mayor jerarquía lo público y su interacción con el volumen que conforma el objeto, de manera que se determinen sus límites y los eventos que entre sí se desarrollen.


II

ANÁLISIS CRÍTICO SITUACIÓN PRESENTE

Se hace necesario, establecer unos parámetros por los cuales enfocaremos el análisis crítico del edificio: primero, el objeto. Observar las influencias históricas y las variables que afectaron los procesos de conceptualización, proyección y construcción, así como la influencia estilística de la misma; segundo, lo urbano. Establecer la importancia que el diseño y la implantación le dio a lo público, como escenario de interacción y consenso social, dentro del marco de construcción de lo social, además de las dinámicas urbanas en el perímetro inmediato; tercero, lo semiológico. Observar la correspondencia o la interdependencia del objeto y el entorno, que implica su caracterización como elemento icono institucional, gubernamental, de carácter simbólico dentro del territorio. En el primer punto encontramos un edificio diseñado y construido dentro del último cuarto del siglo XX, recién decretada la muerte del movimiento moderno y enfrascados los “movimientos arquitectónicos” en una lucha a muerte por heredar el espacio que dejo tan importante difunto. Tendencias hacia el brutalismo, el estructuralismo, Neo-racionalismo, neo-clasicismo, tardo-modernismo, y demás corrientes post modernistas se lanzaron tras la corona. Un remedo de arquitecturas personalizadas y esnobistas de manera temeraria quisieron imponer sus caprichos, algunas basadas en tendencias filosóficas y otras dentro del más puro eclecticismo, buscando de alguna manera una justificación a las antojadizas formas, resultantes de su discurso, conjugando formas anacrónicas que presentaban el futuro y/o rememoraban el pasado.
De esta manera, realizar la aproximación a la conceptualización del objeto, quedaría supeditada a criterios ocultos, referenciados en la incertidumbre, que se reflejan en el ámbito de la proyectación edilicia.
El edificio objeto de este estudio, pareciera responder al eclecticismo rampante en la época, y se implanta de manera caprichosa sobre un lote de topografía inclinada, acomodándose en sus linderos, sin ninguna trascendencia en la búsqueda de la integración con el espacio público existente. Se lee en el volumen la búsqueda por sobresalir dentro del entorno a través de la búsqueda de la monumentalidad por la altura, irrumpiendo sobre los perfiles urbanos y sobre la escala de ciudad representada.
En el segundo punto es importante analizar el entorno que envuelve el objeto de análisis crítico, encontrando que el edificio esta adosado espalda con espalda al Palacio de los Leones, antigua sede de la Gobernación del Táchira y edificio de conservación patrimonial, de tipología republicana que recibe en un atrio las dinámicas urbanas desde parque Antonio José de Sucre, y que es su momento con otras edificaciones hoy ausentes del escenario, como la casa de habitación del gobernador del Táchira, se leyeron como centralidad civil. De esta manera, se Parque – Palacio – Gobernación, constituyen un conjunto, que debe interpretarse como unidad urbano arquitectónica, criterio que no se establece dentro de la implantación urbana del edificio.
El objeto arquitectónico estudiado, al implantarse retrocede del paramento delineado por el Palacio de lo Leones, en procura de complementar el angosto anden con un pasaje aporticado, que de manera funesta, cierra toda posibilidad para el disfrute de lo público, frente a la realidad topográfica, que a modo de foso medieval, cierra su contorno con muros llenos y jardineras forzadas, dejando sin solucionar el espacio destinado por norma a la acera, frente a las dinámicas peatonales con que se carga el sector. Su acceso se hace de manera abrupta y descendente, hacia un espacio deprimido, sin denotar la importancia que este elemento debe suscitar dentro de la lectura del edificio. En el entorno inmediato, se observan construcciones de tipología colonial, de la segunda mitad del siglo pasado, la mayoría en un avanzado estado de deterioro, otras con intervenciones que han procurado la instalación de unidades o locales comerciales. De igual forma se observan, edificaciones de tipología de transición además del Palacio de los Leones, y de la modernidad, que permitieron la densificación en el marco del Parque. Vehicularmente la calle 5 dirige el flujo hacia la séptima avenida y la calle cuarta en sentido contario hacia el occidente de la ciudad. Sin embargo los perfiles viales son insuficientes para el aforo vehicular que se presenta en el sector, además de las deficiencias por puestos de parqueos que inducen a ocupar y legitimar, las calzadas.
Al interior de la edificación y una vez franqueado el acceso, se vincula a una circulación perimetral a un patio, aislado por la pantalla que genera los puntos fijos de circulación vertical. Ya en el patio, se percibe un muro en piedra, límite de los dos escenarios de gobierno, sobre el que se percibe una elevación del plano base, como solución a la ventilación de los cuatro niveles de parqueaderos subterráneos y subutilizados.
Entrados al tercer punto de análisis, y entendiendo que la edificación como sede de una institución que detenta el poder público, observamos que el objeto como elemento semántico es incierto y por consiguiente no hay acercamiento a la redefinición sintáctica del entorno, aunque se impone por altura, por escala en el perfil sobre las edificaciones del entorno inmediato, con reconocimiento y valoración por algunos transeúntes.
De esta manera, resalta por su destacada altura sobre las demás construcciones que le rodean, no consolida el carácter de elemento iconográfico, ni de hito urbano representativo de la unidad estadal y mucho menos como elemento simbólico del territorio que representa.
Concluido este análisis y determinadas la falencias que tiene el objeto de análisis crítico en cuanto a su marcado eclecticismo y negación al marco histórico, la implantación caprichosa negada a lo público y la no correspondencia del objeto con el entorno, ni como elemento representativo de su institucionalidad, estamos cumpliendo el análisis desde la práctica, funcional, con base basado en la formulación de un diagnostico descriptivo de que se hablo al principio de este escrito.
Entramos ahora a trascender las barreras de lo arquitectónico y urbano, profundizando en los criterios de diseño y principios institucionales, arquitectónicos y urbanos que deben contener el edifico, para acercarse al cumplimiento del objetivo de una edificación de connotación gubernamental, de una entidad de poder, dentro de lo social, vivencial, humano y de pertenencia.



III

PRINCIPIOS DE INTERVENCIÓN Y CONCEPTUACIÓN DEL PROBLEMA

El primer principio institucional que se analizará es la Participación pública hacia la inclusión social desde la Territorialidad – centralidad; el segundo principio Imagen del estado como reinterpretación histórica en el marco de la Igualdad y la justicia social.

Podemos definir, de acuerdo con el Departamento de Desarrollo Sostenible del BID (2000b), que la Participación pública es el proceso mediante el cual el gobierno y la sociedad civil dialogan, estableciendo alianzas, compartiendo información y diseñando de manera interactiva políticas, proyectos y programas de desarrollo con la participación y compromiso de todos los actores sociales incluyendo, los pobres, los marginados, y las minorías étnicas. Igualmente, anterior a la re-valuación de estos conceptos, la participación pública estaba regida por la institución estadal, quien de acuerdo a criterios de orden científico, proveía de servicios e infraestructura urbana y rural, a un estado categorizado como medio burgués.
Por otra parte y dentro del desarrollo holístico o integral propuesto por el Banco Mundial, respecto a los ajustes estructurales y sociales del desarrollo, que induce hacia la estrecha relación entre desarrollo económico y planificación urbana, se podría inferir que, dentro de las medidas de compensación del modelo económico, se establece la participación pública, con la integración de todos sus actores, impactando el desarrollo urbano, como unidad de producción eficiente, tanto económica como social.

De esta manera, estas experiencias municipales, promueven la equidad y el ejercicio de los derechos fundamentales, en la medida que propician que el gobierno, competente e integro, facilite mecanismos y espacios de interlocución entre los entes gubernamentales y la sociedad civil como agentes capaces de intervenir en las decisiones de planificación estratégica.

En el Estado Táchira, el estado (social) se destaca por la participación pro-activa de concepción y definición, nacional y binacional, generando constantes cambios físicos y de interpretación, que orientan la transformación de lo público.
De esta manera, se puede realizar una aproximación al significado del edificio sede de la Gobernación del Táchira, basado en la recuperación y generación de los espacios de participación ciudadana, con la inclusión de todos los actores de la sociedad civil interactuando con los estamentos gubernamentales, representados físicamente con la recuperación del espacio público del edificio y entregándolo como entidad pública, para uso y goce de los ciudadanos, así, estaremos frente a un cambio de significado en el acontecer diario del entorno urbano, haciéndolo pertinente, participativo y humano.
Para abocar el segundo principio podemos decir que el Táchira es Rio, Andes, Frontera; que San Cristóbal es cruce de caminos, es cordialidad, pueblo que trasciende la frontera, sin dejar de ser.
La imagen del estado Táchira como ente territorial aunque intangible y subjetiva, se enmarca dentro del imaginario colectivo y se interpreta dentro de los valores culturales y componentes físicos de su geografía.
El objeto arquitectónico analizado dentro de este estudio crítico debe interpretar ese imaginario colectivo y proyectar una imagen de institucionalidad coincidente y desde allí irradiar confianza y autoridad hacia sus gobernados en el marco de la igualdad y la justicia social.


IV

PROPUESTA CONCEPTUAL Y PROYECTUAL DE LA SOLUCIÓN

Para lograr la aplicación de estos principios establecimos los siguientes pasos:
Un Proyecto mínimo: implementar y desarrollar un programa urbano arquitectónico, que sin afectar lo privado establezca la unidad entre lo público como bien de la ciudadanía y lo público como estamento gubernamental, buscando la integración axial e integral, de la sede de la Gobernación, Palacio de los Leones y el Parque Sucre, realizándole la mínima intervención del edificio.
Formular contenidos de forma social: diseñar una serie de elementos constituyentes y articuladores del espacio público particular y general, que identifiquen un proyecto integral, consolidando la relación de los tres elementos urbanos arquitectónicos que componen el conjunto de la Gobernación, de manera que se puedan desarrollar en el programas de incidencia social, con cabida de todos los actores de la vida metropolitana y regional del Táchira.

Proponer elementos urbanos integradores que contengan un lenguaje simbólico, representativo del Tachirense: para tal efecto se proyectó una única plaza, desde el edifico de la Gobernación hasta el parque, demarcando con textura de piso los ejes viales, y las plazas de acceso a los elementos que conforman el conjunto. Igualmente se desarrollo un elemento de agua (rio), que atraviesa el objeto urbano arquitectónico, bordeado por dos caminos dentro de una zona verde. Estos elementos tejen el proyecto constituyéndolo en una unidad conformada por tres elementos representativos cada uno de su tiempo y su espacio

Desarrollar elementos culturales y naturaleza: El rio Torbes, así como puede ser un agente de división del área metropolitana de San Cristóbal, puede ser un agente integrador y de unidad estadal, alrededor del cual se entrelaza el diario acontecer de la vida citadina. El proyecto no interviene la arborización existente en el Parque Sucre y complementa el entorno natural con palmeras sembradas en el borde de la vía que demarcan los ejes de transito vehicular y peatonal

Proponer recintos participación e interacción ciudadana: La planta baja del edifico de la gobernación se recupera a lo público, retirando los muros y jardinera que la cierran y demoliendo parte de la placa de la planta del primer piso. Así mismo se hace pertinente el retiro de los dos módulos del edificio de la Gobernación, adosados al muro en piedra del Palacio de los Leones, dejando el espacio urbano penetrable y logrando la dilatación de los dos objetos arquitectónicos, significando este retiro el respeto del nuevo edifico hacia el monumento histórico, debajo del espacio abierto y penetrable por cualquiera de sus lados, integrado por el canal de agua símbolo del rio Torbes, desarrollando así, plazas pública de carácter cívico.

Reactivación de la dinámica urbana: La condición de uso residencial e institucional, permite el contar con población permanente, que en congruencia del carácter público y abierto de la edificación, debe incidir con propuestas de reactivación comercial, recreacional, institucional y residencial, que propendan por la consolidación del complejo y su entorno inmediato, como nodo urbano de interacción social.

Ensayo presentado en la catedra de CRÍTICA URBANO ARQUITECTÓNICA dentro de la Maestria ARQUITECTURA CUIDAD E IDENTIDAD de la UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DEL TÁCHIRA, por los Arquitectos Clerdy Castillo, Javier Peñalosa y Jorge Bitar Ramírez.



San Cristóbal, Agosto 2009

miércoles, 12 de agosto de 2009

CENTRO COMERCIAL TERTULIA PLAZA


CENTRO COMERCIAL TERTULIA PLAZA
CÚCUTA COLOMBIA.
PARDO GONZÁLEZ Y CIA Ltda.
ÁREA 2400 M2

7 Locales comerciales
18 oficinas
Restaurante Show
Casino
Área Administrativa
Servicios Generales


















DISEÑO ARQUITECTÓNICO
Jorge Bitar Ramírez
Arquitecto

Colaboradores
Jhime Santos Jaimes
Jorge Andres Bitar


Arquibitar Arquitectos
2009

martes, 11 de agosto de 2009

EDIFICIO INSTITUCIONAL
















DISEÑO ARQUTIECTÓNICO

Jorge Bitar Ramírez
Arquitecto

Colaboradores:

Arq. Yurani Mercado Villalba
Jhime Santos Jaimes
Jorge Andrés Bitar Q.


Arquibitar Arquitectos
2008

viernes, 10 de julio de 2009

LA INFORMALIDAD COMO UNA REALIDAD SOBRE LAS POLITICAS DE ESTADO

LA INFORMALIDAD COMO UNA REALIDAD
SOBRE LAS POLITICAS DE ESTADO


HISTORIA COMERCIAL DE LA CIUDAD

La ciudad de Cúcuta, desde principios del siglo pasado ha sido sometida a continuos flujos migratorios que han tenido consecuencias sociales, culturales, políticas y económicas.

Antes del siglo XX, además de los criollos ya asentados en la ciudad y los aborígenes y negros libres, llegaron a la ciudad, catalanes, alemanes e italianos, entre otros extranjeros. La ciudad en 1875 tenía una población de 11.846[1] habitantes de los cuales más de cinco mil eran extranjeros, cifra alta en comparación con las demás ciudades de Colombia y Venezuela. Los árabes, empezaron a llegar a comienzos al final de la primera guerra mundial y traían pasaporte turco, por lo que fueron llamados turcos por los habitantes de la ciudad. De Venezuela se asentaron en Cúcuta familias de Zulianos, Merideños y Tachirenses. Todos estos extranjeros llegaban con vocación de comerciantes, implementando un comercio activo en al zona de frontera y explotando la cercanía y salida al lago de Maracaibo, haciendo que la ciudad perdiera su vocación agrícola y se centra únicamente en actividades comerciales. Al contrario, los Cucuteños no emigran de manera como lo hacen habitantes de otras regiones, sino que se establecen en su tierra y permanecen enraizados por generaciones, haciendo que los foráneos terminen sintiéndose cucuteños. El decir es que a un cucuteño no se va de Cúcuta ni con un terremoto y al visitante que a Cúcuta no se viene sino se vuelve.

Esta proliferación de extranjeros y nacionales de otras regiones asentados en Cúcuta y dieron un vuelco a la ciudad hacia el comercio desmedido y desordenado. La ciudad perdió el sentido de pertenencia y la fuerza que tenía la generación del ferrocarril a finales del siglo XIX, la ciudad se convirtió en un bazar donde se vendían mercancías al mayor y al detal en locales, casetas, espacios públicos y cualquier lugar donde los compradores venezolanos pudieran llegar con su poderoso Bolívar.

Los elementos simbólicos de la pertenencia de la ciudad desaparecieron y los valores cambiaron. La marca social de la ciudad de las calles amplias se convirtió en caos, mercadería y desorden, de la mano de las autoridades que omitían y permitían.

Lo urbano quedo subyugado a la condición impuesta por el animal humano,

Nuestra ciudad creció producto de su pujanza comercial recibiendo foráneos que buscaron pasar a Venezuela y terminaron quedandose, engrosando los cinturones de miseria, promoviendo invasiones y asentamientos subnormales generando una inestabilidad natural, dentro del consabido fenómeno de “urbanismo sin urbanidad” integrado tan sólo por un espíritu comercial

La ciudad creció bajo el paradigma de “ciudad de nadie”; una ciudad donde hay que “ganarse la vida” y donde para hacerlo es necesario “moverse”, actuar como cazadores, invadiendo y tomando para sí todo espacio libre donde fuera posible la caza.

El crecimiento desordenado e informal y la generación de asentamientos subnormales de la ciudad en los últimos 25 años del siglo pasado fueron más rápido que el desarrollo formal urbano, comercial y educativo. La ciudad de Cúcuta perdió pertenecía y se convirtió en tierra de nadie, donde los foráneos podían venir a hacer “lo que les diera la gana”, llenando la ciudad de establecimientos comerciales formales e informales, con el auspicio de la politiquería de turno, a donde llegaban los compradores venezolanos con el poder de su divisa y dentro del mayor caos urbano y cívico se convirtió a la perla del Norte en la vitrina de Colombia y el prostíbulo de Venezuela. Los valores de solidaridad, buena vecindad, buen ciudadano, la limpieza de la ciudad, la moral y las buenas costumbres, pasaron a un segundo nivel.

En la búsqueda de medios de subsistencia, y descubierta la vocación comercial de la ciudad, hombres y mujeres de distintas profesiones, “renunciaron” a su saber hacer y se dedicaron al oficio del comercio, sin ninguna experiencia o capacitación, solo comprar y vender y que algo quede en la diferencia para el sostenimiento de la familia.
Como espacio de trabajo se tomaron el espacio de nadie, lo público, aceras y plazas que circuladas por compradores venezolanos sirvieron de alberge a sus mercancías, organizando esta informalidad en sindicatos con el amparo cómplice de las autoridades de turno.

RESPUESTAS PÚBLICAS Y PRIVADAS

Contrario a esta cultura del espacio público como tierra de nadie, la constitución política de Colombia de 1991, en su artículo 82, estableció: "Es deber del Estado velar por la protección de la integridad del espacio publico y por su destinación al uso común, el cual prevalece sobre el interés particular."

Por medio de acción de tutela, amparo establecido en la misma carta magna se obligó a la administración local a dar cumplimiento al citado artículo, y por medio del desalojo se recuperó para el ciudadano común el espacio público, primero en el centro de la ciudad, y posteriormente el mercado la sexta.

El desalojo trajo consigo la búsqueda de la reubicación del punto de trabajo en un sitio formal, generando la construcción de centros comerciales para albergar a los desplazados comerciales informales, y produciendo una oferta de locales

Pasada más de una década del desalojo, y la recuperación del espacio público, la transformación del centro de la ciudad, dentro del proyecto de “Centro Comercial a Cielo Abierto”, y el control policivo sobre los buhoneros, el fenómeno de la invasión del espacio no se terminó. Dentro del marco cultural que envuelve al comerciante informal, la ubicación de puestos de venta ambulante en el centro de la ciudad es el modo de ofrecer sus productos y lograr los recursos para su subsistencia. La ubicación dentro de un espacio comercial formal no es alternativa, por no contar con recursos para el sostenimiento de un local, por no creer que tengan algún futuro dentro de la formalidad, por miedo a ser intervenidos por autoridades de impuestos, por creer que no va haber el flujo de personas que garanticen la venta, entre otras justificaciones.

CONCLUSIONES

Lo anterior muestra que las políticas de estado son insuficientes para lograr una recuperación del espacio público sin buhoneros, ni ventas ambulantes. La cultura informal de los cucuteños y los compradores venezolanos permiten que este tipo de comercio permanezca vigente, por que al haber quien compre, siempre habrá quien venda. El incremento de mujeres cabeza de hogar en el oficio de las ventas ambulantes es notorio, igual que la sistemática transición a mercancías más manejables y de fácil transportación.

El estado debe trascender la preservación y el mantenimiento del orden público, creando conciencia en la comunidad, de asumir uso y goce del espacio público como una responsabilidad, una obligación de todos, y un derecho fundamental que permitan el desarrollo comercial como fundamento de la vocación de la ciudad, sin menoscabar los derechos adquiridos por los que se acogen a la formalidad, pero sin perjudicar a las familias que por razones culturales o económicas subsisten de la informalidad comercial.

Se debe conocer y determinar las diferentes causas que generan este fenómeno, y, diseñar políticas públicas integrales y efectivas basadas en los principios rectores de: 1) La educación; 2) La tolerancia; 3) La Solidaridad; 4) Prioridad del interés general sobre el particular; 5) La igualdad y reconocimiento de la dignidad humana, como un derecho de aquellas personas que por su condición económica o física se encuentren en circunstancias de debilidad manifiesta.

BIBLIOGRAFÍA

Ángel, Rafael E. (1990) Historia de Cúcuta. La casa del Duende.
Lefebvre, H. (1969) El Derecho a la Ciudad. Barcelona: Ediciones Península.
Pérgolis, JC. (1997). “La ciudad, la otra mitad del sol”, Revista Arte para Bogotá. Ed. Universidad Nacional de Colombia e Instituto Distrital de Cultura y Turismo. Bogotá.
Velásquez, F. (1996) Ciudad y Participación. Ediciones Foro Universidad del Valle. Cali
Yori, Carlos Mario. (2003) Topofilia, Ciudad y Territorio. Universidad complutense de Madrid.
Fragmento del ensayo presentado en la catedra de METROPOLIS TRANSFRONTERIZAS dentro de la Maestria ARQUITECTURA CUIDAD E IDENTIDAD de la UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DEL TÁCHIRA

San Cristóbal, 10 de julio de 2009


[1] Fuente: Ángel, Rafael E. (1990) Historia de Cúcuta. La casa del Duende.

jueves, 14 de mayo de 2009

EN LA BÚSQUEDA DE LOS HEREDEROS DEL MOVIMIENTO MODERNO

EN LA BÚSQUEDA DE LOS HEREDEROS DEL MOVIMIENTO MODERNO

I

El movimiento moderno ha muerto. La posmodernidad se abalanza sobre la historia queriendo hacerse protagonista de la nueva arquitectura. Eran las 3:32 del 15 de julio de 1972 un réquiem por su eterno descanso se escuchó al caer el conjunto funcionalista Pruitt-Igoe en Missouri.

El movimiento moderno o la arquitectura de la modernidad, nace conjuntamente en Europa y Estados Unidos en 1920 como respuesta histórica a reconstruir un continente azotado por la guerra, con una urgente necesidad de vivienda y el emprendimiento de grandes proyectos urbanos en las viejas ciudades europeas, de la mano de jóvenes arquitectos, para quienes reproducir el pasado era vergonzoso.

Un rechazo total a todo vestigio de la arquitectura clásica, una rotura total con la tradición fue el enfoque de los noveles arquitectos quienes reaprendieron la forma de concebir el urbanismo y la arquitectura, a través de procesos de diseño donde lo funcional y racional era el parámetro a seguir.
Los espacios habitables racionalizaron al extremo el concepto de habitabilidad, sometiendo a sus habitantes al querer del arquitecto.

“La forma sigue a la función”, sentenció Lois Sullivan; y la vivienda se convirtió según Le Corbusier en “una máquina para vivir”, configurándose la función como el elemento básico e integrador de toda arquitectura. Wright vio “el edificio no como cueva, sino como un amplio refugio para el espacio abierto”(la casa natural, P. 16 1970). La liberación total de todas las formas conocidas (primer objetivo de la Bauhaus), y retomado por Moholy-Nagy en su instituto de diseño de Chicago, determinaron la destrucción de toda forma de clasicismo. La arquitectura del pasado quedó enterrada.

La función racional del edificio, era el paradigma establecido, verdad verdadera que se anteponía a la forma y a la estructura negando así el concepto Vitruviano escrito en su tratado "De Architectura", que la arquitectura descansa en tres principios: la Belleza (Venustas), la Firmeza (Firmitas) y la Utilidad (Utilitas). O como diríamos los arquitectos contemporáneos, en la forma la función y la estructura, siendo todas de igual importancia en el desarrollo de un objeto de arquitectura.

De cualquier manera, dentro del marco del modernismo, la forma nunca pudo seguir a la función. La revolución industrial con sus nuevos materiales (hierro y vidrio) permitió envolver la función, pero nunca alcanzó la consecuencia de su causa. La planta libre, permitida por los nuevos materiales, manifestó una nueva forma de “hacer espacios”, es decir de elevar en tres dimensiones el diseño de la planta.

II

Le Corbusier, avanza hacia esta destrucción del pasado planteando sus cinco puntos para una nueva arquitectura, o mejor en sus palabras “los cinco puntos significan una estética fundamentalmente nueva, nada queda de la arquitectura de épocas anteriores…”. (obra completa, 1910 -1929 P.128, 1937). Mientras por una parte, Le corbusier avanzaba en la búsqueda de las relaciones espaciales básicas, por otro lado Walter Gropius, y su mítica Bauhaus buscaba una nueva sensibilidad hacia las formas y los materiales. A su interpretación estos hacedores de una nueva arquitectura coinciden en que se debe partir de las medidas del hombre.

Convencidos de que estaban ante la respuesta definitiva a todos los problemas de la arquitectura, el movimiento moderno se estancó. No resolvió la manera de permanecer vigente ante los cambios que pedía un mundo en continuo movimiento y desarrollo, donde las ciudades se convertían en seres vivos inmanejables que crecían conforme a sus necesidades económicas, sociales, migratorias etc. El movimiento moderno dejo de ser alrededor de 1960 lo demás fueron escaramuzas de un desahuciado.

III

Pareciera ser que la esperanza de una nueva arquitectura solo cumplió con la fase de destruir todo indicio de lo clásico y de lo histórico. Como a todo buen muerto, le aparecieron sucesores. El ámbito de la arquitectura se llenó de movimientos que pretenden heredar el legado del movimiento moderno inclusive negándolo. Los deconstructivistas, por ejemplo, quisieron seguir negando lo establecido. Bernard Tschimi, arquitecto franco estadunidense, que predica la práctica de la libertad personal del diseñador frente a sus obras, afirma: “… Las circunstancias culturales de hoy sugieren la necesidad de descartar categorías establecidas de significado e historias contextuales… para estimular el conflicto más que la síntesis, la fragmentación más que la unidad, la locura y el juego más que el manejo cuidadoso, … detrás una arquitectura que no significa nada” (Parc de la villette, diseño arquitectónico, 3-4 1987).

El rey ha muerto… Que viva el Rey. Brutalistas, estructuralistas, Neo-racionalistas, neo-clasicistas, tardo-modernistas, y demás tendencias post modernistas se lanzaron en pos de la corona. El vacio dejado por el movimiento moderno, aunado a la necesidad del hombre de romper con los paradigmas impuestos por la modernidad, causó una excesiva reacción. Una gama de tendencias salieron del partidor tratando de imponer su criterio y su verdad sobre los demás “ismos”. Arquitecturas personalizadas y esnobistas, buscaron temerariamente adaptar a sus caprichosas respuestas volumétricas, un discurso filosófico que les diera peso y coherencia y se impusiera sobre las demás tendencias de moda. El paisaje urbano, de manera desbocada se lleno de objetos de arquitectura de un aberrante eclecticismo, que conjugaron formas anacrónicas que presentaban el futuro pero rememoraban el pasado.

Tipologías estáticas, que aparecieron después de los años 60 con el nombre de neo-racionalismo, cuyo mayor representante fue Aldo Rossi, fueron atacadas ferozmente por la dinámica del deconstructivismo. Ambas tendencias, sin lograrlo pretendieron ser los legatarios del extinto movimiento; el primero retomando la búsqueda de la forma primaria y el otro negando todo apego al pasado.

Ni lo uno, no lo otro, sino todo lo contrario, pareciera ser el dilema que enfoca la búsqueda de un significado a la arquitectura. El problema radica en pretender resolver un asunto de fondo desde la forma; es decir se pretende llegar a la forma absoluta basado en el deseo utópico de la unidad y la armonía, o su negación, según fuera el caso. Estos movimientos continúan especulando en la búsqueda de elementos de moda que le den identidad a su tendencia, siempre desde lo formal.

IV

Si penetramos en el pensamiento de Martin Heidegger, y nos aproximamos a la esencia del significado en arquitectura, encontramos planteado en su tesis el desmoronamiento de metafísica europea, que al igual que los modernistas destruye los símbolos del pasado, y remplaza el “ser de” por el modo de “ser en el mundo”. Aquí el ser no es reflejo de una idea absoluta, sino toma identidad en la medida que se relaciona con otros seres.

Heidegger, identifica su pensamiento como fenomenológico, y cataloga la fenomenología como la ciencia del ser de las entidades, (ser y tiempo 1951), partiendo desde Husserl “De vuelta a las cosas mismas” pero no entendiendo las cosas en los términos Husserlianos de conciencia humana, sino como “ser en le mundo”. A través del pensamiento fenomenológico, se puede “Diseñar para la vida” en palabras de Moholy Nagy. (Visión en movimiento, P.33)

Llegamos entonces a concluir que los forjadores del movimiento moderno de manera ingenua, aplicaron principios fenomenológicos, pero aplicados a la forma y no al significado de la forma, que entrelaza el pensamiento y el sentimiento, o mejor, la idea y la materialización de esta.

SI retomamos la idea pura del movimiento moderno, libre de los fundamentos formales y académicos de sus creadores, encontramos una corriente arquitectónica valida y vigente, generadora de una deconstrucción libre de sistemas e ideologías, y que encaminada hacia una postura fenomenológica de los modos del ser en el mundo, devolviendo la identidad de cada ser desde su forma mas primitiva, seremos los legítimos herederos del legado del modernismo.

aeternam dona ei Domine.
Et lux perpetua luceat ei
Requiescat in pace.
Amen.
BIBLIOGRAFIA

GIEDION, Sigfried, 1941. Espacio, tiempo, arquitectura.
WRIGHT, Frank Lloyd, 1970. La casa natural.
Le Corbusier, 1937. Obra completa, 1910 -1929.
Le Corbusier (1999). Principios de urbanismo (La Carta de Atenas).
TSCHUMI, Bernard, 1987. Parc de la villette, diseño arquitectónico
HEIDEGGER, Martín, 1951. ser y tiempo
HALL, P. (1996). Ciudades del mañana. Historia del urbanismo en el siglo XX. Barcelona
Lefebvre, H. (1970). La Revolución Urbana. Madrid: Alianza Editorial.
Norberg Schultz, C. (1975). Existencia, espacio y arquitectura.

Ensayo presentado en la cátedra de PENSAMIENTO URBANO ARQUITECTÓNICO CONTEMPORÁNEO dentro de la Maestría ARQUITECTURA CUIDAD E IDENTIDAD de la UNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DEL TÁCHIRA